miércoles, 26 de septiembre de 2012

El regalo de una mirada



Hay tantas maneras de mirar la vida como ojos que la miran.
Y qué se yo cómo miran otros ojos,
cómo se detienen, qué noches en vela los tienen cansados, o  que exceso de sol los ciegan.
Qué se yo.
 Qué sabemos...
Y sin embargo,  desencuentros, ignorancias, disgustos, malas caras.

Pero si  nadie puede abarcar la  totalidad de lo real  en su comprensión ( es metafísicamente imposible: somos limitados) ¿ por qué no recibimos  la  mirada de quien camina a nuestro lado como un regalo?
Al  don de su mirada inteligente  lo envuelven  nuevos  matices de la realidad,   nuevas perspectivas  y quizás colores más vivos. Y más  hondura, y  más ingenio,  y más belleza, y más cielo.

Qué tontos somos si no agradecemos   a esos ojos su regalo.
Qué tontos somos si nos quedamos faltos   de una  nueva mirada a la vida, como eso, como tontos parados y complacidos en  su  pequeño mundo miope, recortadito, cerrado:
 Sin alas...

5 comentarios:

  1. Tienes razón querida amiga, la mirada dice mucho si prestamos atención; aunque en realidad, no sé a quién te refieres (hay muchas personas que por diferentes circunstancias caminan a nuestro lado)estoy de acuerdo en que hay un lenguaje en las miradas. Aquí, en Perú, por ejemplo, algunas son confiables y otras no. Allí también es muy importante aprender a descifrar la mirada.

    Un gran abrazo

    ResponderEliminar
  2. Hola Drac, me gusta verte por aquí...Adivino tu mirada. ¡Sabes? me dí cuenta al publicarlo que el texto se podía entender de dos maneras. Yo pensé más en las discusiones que se pueden evitar si caemos en la cuenta de que al mirar la realidad podemos comprender y "ver" aspectos diferentes cada uno. Y que compartir esas "miradas"- nos amplía nuestro propio horizonte vital.

    Gracias por tu mirada, y por no pasar de largo...

    ResponderEliminar
  3. Ah, y pensaba en todas las personas que llegan a nuestra vida por un motivo u otro. No pensaba en nadie en particular
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  4. Trasnochador tambiénviernes, septiembre 28, 2012

    Y esa luna que te mira mientras escribes

    ResponderEliminar
  5. He vuelto de Sansebastián Tras, y qué bonita es la luna sobre la bahía de la Concha; qué dulzura...

    ResponderEliminar