martes, 22 de abril de 2014

belleza


Quizás escribir no sea más que abrir la espita de las palabras que dibujan los  sentimientos, y
dejar que sean la t,  o las uves,  las que rompan el silencio de la noche   como la  melodía que flota en el aire,
que susurra secretos del alma,
canciones del pasado,
caricias olvidadas.
Quizás cuando me acerque al precipicio de lo irracional  y haga juego malabares con las consonantes, habré llegado a la libertad. Y que  sean  entonces las farolas de la seguridad las que  se queden con todos los sujetos, con todos los verbos y  con algún que otro  complemento circunstancial.

La formalidad  pura y  marcada, siempre añorará  la  belleza  del resplandor:  la luz del ser que nos rompe en el escalofrío de la contemplación.


martes, 15 de abril de 2014

Gracias por mostrarnos tanta bondad, Jesús




Hoy quiero dar las gracias  a la vida porque ha existido al menos un hombre,  uno en  este mundo, de nombre Jesús, que dió , de palabra y de obra , un significado nuevo  y sorprendente a la palabra Amor: el significado del PERDÓN que llega  hasta  la radicalidad más impensable del "enemigo".

Y hoy,   
que tengo el alma ronca,  y  que me gustaría sentarme cerca de un tronco con Miguel Hernandez a llorar las penas,  grito  desde  lo más profundo de mis adentros ¡Gracias  , Jesús,  por dejarme   ver en tu rostro  la  huella del Amor que me reconforta!

Gracias, Jesús,  por decir  esa  verdad  incómoda que te llevó  a la cruz.

Gracias , por hacer temblar al poder cuando predicabas la liberación de los esclavos:
Gracias  por unir la alegría y la felicidad al camino del sacrifio y de la misericordia.
Gracias por curar a los enfermos, 
por no apartar tus manos  del leproso, 
por mirar primero a los pobres de cuerpo o de espíritu.

  Y  gracias por no dejar de perdonar hasta el último aliento:
 Ni las espinas, ni los clavos ni la lanza pudieron con tu  Amor en la manifestación  más heroica del pedón.
 

 Y Gracias,  ahora Jesús,  por no dejarme perdida en el  mundo del "ojo por ojo y diente por diente" . Gracias ahora Jesús, por llamarme bienaventurada cuando lloro...


¡Hoy sabemos, y a mí me deja fascinada, que existió un hombre que dió hasta la última gota de su sangre, por Amor! Un hombre que era hijo de DIOS: la fuente inagotable del AMOR.


P.D. Lo esribo después de ver en  la televisión procesiones blasfemas  de las que los ateos serios y respetuosos  se averguenzan. Y sin embargo Él , el Amor,  no puede dejar de amarles...

lunes, 17 de marzo de 2014

Derivando

Y rompo el ancla en pedazos
y voy detrás de tu barca
derivando.
Que si la vida es remar,
yo quiero seguir remando...