sábado, 18 de diciembre de 2010

LOS que dicen lo que SÍ queremos oir...

Hace ya algunos meses, una persona me dijo, con toda naturalidad, que ella siempre decía a los demás lo que querían oir porque era lo que nunca fallaba en las relaciones humanas. Lo que pensaba se lo guardaba, y en todo caso sólo era sincera con sus hijos porque ellos sí le importaban.
(He recordado esto porque es una tesis absolutamente opuesta al post anterior)

Sigo con el nuevo pensamiento:

Salir a la vida a decir al prójimo , intencionadamente, sólo lo que quiere oir es de una HIPOCRESÍA ventajista supina. Y la intención parece que es sacar PROVECHO de esa actitud.
Los que escuchamos lo que SÍ queremos oir podemos caer en la trampa-complacencia de que nos gusten ese tipo de personas que no aportan nada a nuestras vidas. Personas que son humo...

Pero voy a ver cómo uno este pensamiento con la NAVIDAD que llega...

Lo quiero unir porque tengo muy presentes las duras palabras de Jesús de Nazareth hacia los fariseos, hacia los hipócritas:"raza de víboras"
Jesús de Nazareth, cuyo nacimiento celebramos en las Fiestas de Navidad, y del que deseo creer que era el HIjo de DIOS, si por algo me fascina es porque ROMPE con todos los esquemas sociales de la mentira y del aprovechamiento y apuesta por la VERDAD, fundamento de la Libertad y sentido del Amor.

Su apuesta sin fisuras por NO decir a los poderosos de entonces lo que querían oir le lleva a la Cruz. Porque la Verdad de sus palabras se ve como un peligro social y sobre todo "político". (Y la verdad siempre se ve como un peligro. Por eso el mundo corona a la mentira como reina . Así, con la mentira, todo da igual, todo se confunde...)
....

Y yo, que miro y piso este mundo cada día , como vosotros, y que tengo las mismas debilidades que cualquiera, quiero quedarme enamorada de ese Jesús al que contemplo hoy en el pesebre. Y quiero seguirle aunque sea difícil y a veces parezca que es para tontos su mensaje y su doctrina. Porque... perdonar a los enemigos y amar a los que nos hacen daño, apostar por la verdad y luchar contra la hipocresia, claro que puede parecer de tontos.

Pero paradójicamente, ese camino difícil y a contracorriente, es el camino de la alegria profunda y de la paz profunda. Ese es el único camino de la justicia. El bien tiene esas consecuencias. El mal, sin embargo, aunque parezca el camino fácil tiene otras consecuencias mucho más lastimosas: inquietud, desasosiego, tristeza, mezquindad,injusticia y violencia

Qué importa pues, que en ese camino de justicia y de verdad, los árboles echen sus raíces en forma de cruz. Qué importa , si es el único camino que nos puede conducir derechos a la FELICIDAD con mayúscula.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Cuando nos dicen lo que NO queremos oir...

¿Cómo reaccionamos cuando nos dicen lo que no queremos oir?

Hoy sólo me sale esta pregunta, porque de cara al Año Nuevo quizás nos vendría bien pensar en nuestra capacidad de "aguantar el tipo" cuando nos hacen alguna corrección
que nos escuece...
Es "la prueba del algodón" de nuestra personalidad.
¿Si o no?
Ya me direís.

Ahora una breve poesía

Y es buscar otro camino,
Y es llover sobre mojado,
Y es no llorar cuando quema...
No solamente de versos
están hechos los poemas